Si bien la responsabilidad de velar por la salud de los niños, recae directamente en los adultos, el tema del deporte y sus beneficios, no siempre se toma en cuenta como parte de ese bienestar por el que hay que velar.
Hacer que se sientan motivados con la actividad física no siempre se logra. Ahí surge la interrogante si obligarlos o no.
Para la educadora física, Gabriela Mora, en la actualidad, alejar a los pequeños del sedentarismo, de la pantalla, Tablet, o cualquier dispositivo electrónico, es un reto, y los padres necesitan ser inteligentes para sugerirles el ejercicio en los chicos sin que se sientan obligados.
“Obligarnos nunca es una es opción, pero dejarlos en el sedentarismo tampoco. La clave es la motivación, sin embargo, a veces es necesario recurrir a otros consejos para hacer que los niños se muevan y puedan disfrutar de todos los beneficios que el ejercicio físico otorga a los pequeños”, dijo Mora.
12 consejos para motivarlos
- Deja que el niño escoja la actividad física que quiere realizar, ofreciéndole opciones variadas. Si siente que la actividad es una elección personal, la disfrutará más.
- Ofrézcale oportunidades y medios. No solo hablamos de una actividad sujeta a horarios sino de tener a su alcance bolas, cuerdas, patines, bicis. Jugar es ejercitarse. Es importante que el niño juegue también con otros niños, ya que amplía su círculo de afectos y le ayuda a socializar.
- Hágale ver al niño los beneficios de estar en forma. También hay ventajas emocionales que le ayudarán a ver el deporte en positivo.
- Deje que experimente una variedad de actividades y movimientos. No reduzca la actividad física a una práctica monótona que pronto acabará aburriendo.
- No convierta el juego o el deporte en una competición malsana que arruina la diversión. Enséñeles a compararse consigo mismo y a que no siempre es posible ganar. La deportividad es un valor importante, hay que saber ganar con humildad y respeto por el «rival» y perder con deportividad.
6. Apóyelo cuando haya dificultades. Es muy fácil estar ahí con la euforia del principio, pero los niños pueden sentirse inseguros, ridículos… y nosotros hemos de estar ahí para intentar evitarlo y superar esos «baches».
7. Ofrézcales un ambiente seguro. Asegúrese de que el equipo de su hijo y el sitio elegido para practicar el deporte o la actividad son seguros. Asegúrese de que la ropa de su hijo es cómoda y adecuada.
8. Sea un modelo a seguir. Los niños que con regularidad ven a sus padres disfrutando de los deportes y la actividad física tienen más probabilidades de hacerlo.
9. No se exceda. Cuando su hijo esté listo para empezar, recuerde decirle que escuche a su cuerpo. El ejercicio y la actividad física no deben causar dolor. Si esto ocurre, su hijo debe tomarlo con calma o probar una actividad menos vigorosa. Al igual que con cualquier actividad, es importante no exagerar.
10. Planifique con anticipación. Asegúrese de que su hijo tiene una hora y lugar convenientes para hacer ejercicio. Prepare ese momento de ejercicio y no lo tomen a la ligera o que el niño sienta que lo están haciendo por salir del paso.
11. También es importante hablar con el pediatra, él o ella pueden sugerir un deporte o actividad que sea mejor para su hijo, así como hacerle algunas recomendaciones adicionales.
12. También es importante limitar el tiempo para ver televisión y el uso de la computadora. La Academia Americana de Pediatría (American Academy of Pediatrics) recomienda no más de 1 a 2 horas de tiempo total de pantalla, incluyendo la televisión, los videos, las computadoras y los videojuegos, cada día. Utilice el tiempo libre para realizar más actividades físicas.
Heilyn Gomez
Editora de contenido digital de la Revista EKA. Periodista. Asesora de comunicación y estudiante de derecho.
