En un viaje largo, las llantas adquieren más calor y por ello sus componentes tienden
a debilitarse; es acá donde puede suceder que se estalle una llanta y depende del camino y de la velocidad
podría ocurrir un lamentable accidente.
Según Randall Agüero, experto técnico de AutoPits, son muy pocas personas las que acostumbran revisar
el estado de las llantas antes de salir de paseo a viajes largos. “La gente usualmente lo que revisa es
el agua y los cambios de aceite cuando de lo más importante también son las llantas y hay mucho
desconocimiento sobre ellas y su estado”.
Justamente para colaborar con la población de cara a los paseos de Semana Santa, cuando se prevé que
miles de familias se enrumben hacia las playas del Pacífico y del Caribe, el experto da algunos consejos
básicos y sencillos sobre una inspección que le puede ayudar a prevenir cualquier incidente
relacionado con las llantas:
1. Revise y verifique la presión de las llantas:
El problema es que, si las llantas no tienen la presión correcta, la carga que lleva el vehículo
más la distancia puede provocar un daño mayor a las mismas. Lo ideal es revisarlas cuando
están frías al tacto porque la presión aumenta un poco con el calor. Por lo general, el dato de
la presión de las llantas del vehículo está colocado en el paral de la puerta o en el manual
del fabricante; también la presión máxima puede verse en el costado de la llanta. Sino
cuenta con un medidor, lo más recomendable es ir al AutoPits o al taller más cercano antes
de iniciar el paseo.
2. Inspección visual de la huella de la llanta:
Si la profundidad de la banda de rodamiento de la llanta no está en lo mínimo, ésta no
tendrá el agarre y la correcta adherencia al suelo. Lo recomendado es que al menos tenga 2
milímetros de profundidad; de lo contrario, la llanta ya cumplió su vida útil.
3. Observe cualquier desperfecto:
Es importante revisar si hay cortes, los famosos abultamientos o cables al descubierto.
El problema es que muchas personas lo que hacen es inclinarse y revisar la llanta
superficialmente, cuando según los expertos muchos de estos daños están en la parte
interna de la llanta. Para evitar estos problemas, los expertos recomiendan mantenimientos
preventivos que incluyan además de las revisiones, la rotación, balanceo y alineamiento de
las llantas.
También es importante revisar otros componentes del vehículo para salir de paseo tranquilo:
• Verifique el estado general del vehículo:
Cuando se viaja a la playa se lleva más carga de lo normal por lo que es importante revisar además del estado
y la presión de las llantas, nivel y estado de todos los fluidos (aceite motor, liquido frenos, coolant, dirección
hidráulica, limpia parabrisas)
• Mantenimiento preventivo:
Donde se revisen componentes de los frenos, suspensión y dirección.
• Revisar el estado y la limpieza del filtro del Aire Acondicionado y del compresor y evaporizador:
Es acá donde habitan más de 2 millones de bacterias que se acumulan a lo largo del tiempo, que es lo que
respiramos durante todo el camino y que en ocasiones es el causante de muchas afecciones en niños y
personas adultas mayores.
